El Patriota

Nueva Tribuna, sobre la Comunicación Política en relación con la situación de Cataluña

Con la cobertura del Procés, TV3 ha conseguido los mejores datos de audiencia en diez años, pero también la ha colocado en el ojo del huracán

JULIO CEREZO

El último día de septiembre, la víspera del referéndum en Cataluña del 1-0, TV3 modificó la programación prevista para emitir, en horario de máxima audiencia, la película El patriota, el filme que narra el sacrificio y determinación del “héroe americano” Benjamin Martin, un colono viudo padre de siete hijos opuesto inicialmente a la revolución americana pero que, tras la muerte de su primogénito a manos de los ingleses, renuncia a su hacienda y patrimonio y toma las armas en la guerra contra el ejército británico en pro de la independencia de las entonces 13 colonias del imperio del rey Jorge III. El protagonista de la película no es otro que Mel Gibson, el mismo intérprete que unos años antes había dado vida al legendario líder escocés William Wallace, el héroe nacional que llevó a los clanes de las tierras altas en el siglo XIV a luchar contra la ocupación inglesa del rey Eduardo I de Inglaterra en la Primera Guerra de Independencia de Escocia.

De estas dos películas que cuentan en clave patriótica la lucha de una nación por su libertad, TV3 eligió para emitir la que tiene un final feliz para los insurrectos. El relato del movimiento independentista tiene en los sentimientos y las emociones el núcleo central de su discurso, y El patriota, bajo esta óptica, parecía una emisión apropiada y llena de simbolismo con la que jalonar el momento histórico en el que desembocaba el Procés y su reto al Estado, justo el día antes de la gran movilización ciudadana por el referéndum.

TV3: Los mejores datos de audiencia en 10 años

La programación del canal autonómico catalán de este otoño, centrada en una gran parte de su parrilla en el seguimiento informativo del Procés, le ha proporcionado excelentes datos de audiencia desde septiembre y, especialmente, en el último mes. TV3 ha conseguido en octubre un 17,5% de share, su mejor dato desde marzo de 2007, diez años antes. Con esta cifra el canal autonómico aumentó un 40% su audiencia respecto al mes anterior y un 63% frente a los nueve primeros meses del año. En su ámbito de cobertura, TV3 es líder indiscutible. La televisión catalana lidera también de manera destacada tanto el “prime time”, con una cuota del 18,4%, como el “day time”, con una cuota del 18%. Programas como El Matins han congregado alrededor del televisor a más de un tercio de la audiencia televisiva catalana.

Pero esta orientación también ha colocado a la televisión pública catalana en el ojo del huracán, habiendo planeado sobre ella la sombra de la intervención gubernamental a través de la aplicación del artículo 155 de la Constitución. La vicepresidenta del Ejecutivo, Soraya Sáenz de Santamaría, defendió la intervención destacando que era necesario garantizar la neutralidad de los medios de comunicación públicos de Cataluña para que ofrezcan una “información veraz, neutral y contrastada”. Esta posibilidad fue rechazada por los propios trabajadores de los medios públicos catalanes (¡y también por los trabajadores de RTVE!) y, finalmente, la intervención no se ha llevado a la práctica, gracias a una enmienda de los socialistas durante su tramitación en el Senado.

En el fondo de la cuestión se encuentra el alineamiento activo de TV3 al proceso político impulsado por el Govern y la mayoría parlamentaria que lo apoyaba. El tratamiento de los medios públicos de comunicación –tanto de Barcelona como de Madrid–, y su orientación sobre el desarrollo del Procés ha sido objeto de críticas y comentarios por parte de políticos, medios privados, asociaciones de periodistas y multitud de opinadores. En palabras de Ferran Monegal, el periodista de televisión de El Periódico, quien se ha mostrado también muy crítico con el tratamiento informativo de RTVE en este tema, “TV3 es la cheerleader del procés”.

Pero esta vez las críticas han llegado incluso a los editoriales de la prensa internacional. El diario francés Le Monde arremetió duramente en un editorial hace unos días contra la línea “propagandística” que, a su juicio, ha llevado a cabo el canal público TV3: “machacar con una propaganda simplista y engañosa y utilizar una retórica victimista que de manera grotesca intenta hacer creer que Catalunya es víctima del retorno de la dictadura de Franco”.

Y así, la polémica ha perseguido en las últimas semanas a TV3 y a Catalunya Ràdio: Desde el periodista de TV3 que saltó encima de un coche de la guardia civil con motivo de los registros realizados en diversos departamentos de la Generalitat el 21 de septiembre, hasta la denuncia de una agrupación de la guardia civil a la periodista de Catalunya Ràdio Mònica Terribas por “favorecer actuaciones contra el orden público”. El Consell de l’Audiovisual de Catalunya (CAC) exculpó a la comunicadora y consideró que las referencias hechas en el programa ‘El matí de Catalunya Ràdio’, el 22 de septiembre, sobre movimientos de vehículos policiales en las carreteras y autopistas catalanas “no vulneraron la normativa”, exculpando así a la estrella de la radio pública catalana.

Pero ¿hay alguna relación entre la televisión que se ve y el posicionamiento sobre la independencia de Cataluña? Para el politólogo Kiko Llaneras, “el 75% de los catalanes que ven los informativos de TV3 quiere la independencia de Cataluña. Son los noticieros más populares”, afirmaba en un reciente análisis en El País. Aunque señalaba que no cree “relevante ni probable” el adoctrinamiento a través de la televisión, la elección de TV3 frente a otras ofertas televisivas refleja “otra brecha igual (o relacionada) con la que existe por renta y origen familiar”.

Cataluña enfila el camino hacia las elecciones autonómicas del 21D, una fase en la que la Junta Electoral, encargada de velar por la “transparencia, limpieza y objetividad” del proceso electoral, tendrá un papel relevante respecto de la cobertura informativa que los medios de la Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA) ofrezcan de la campaña para los próximos comicios.

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